Jalea de grosellas
La gelatina de grosella roja es maravillosa para todo: color, sabor, funcionalidad. Si quieres, cómelo en su forma pura, si quieres, úntalo en el pan. Y si pones jalea de grosella roja en un hermoso frasco, es muy posible que lo presentes como un regalo. No tendrá dificultades extraordinarias para preparar un postre tan maravilloso, especialmente si sigue todas las recomendaciones de la receta. Solo recuerde que la gelatina de grosella roja diferirá de lo que se prepara con gelatina y, como nos parece, para mejor: la consistencia de dicho plato es más delicada y refinada.
Ingredientes
Porciones 4 latas de 500 g- grosella roja - 1,5 kg
- agua potable - 100ml
- azúcar - 1 kg
Cocinando
Paso 1
Preparar grosellas rojas para gelatina. Separe las bayas de las ramitas y clasifíquelas. Enjuague bien con agua corriente y seque bien con toallas de papel.
Paso 2
Coloque las bayas en una cacerola grande. Verter en agua potable y poner a fuego medio. Llevar a ebullición y cocinar hasta que las bayas comiencen a reventar y suelten jugo.
Paso 3
Retire la olla de grosellas rojas del fuego a una rejilla o tabla de madera. Aplasta con cuidado las bayas con un mortero. Poner al fuego y llevar a ebullición de nuevo. Añadir el azúcar y, revolviendo, llevar a ebullición. Hervir durante 3-5 minutos.
Paso 4
Cuele el contenido de la sartén inmediatamente a través de un colador fino en un tazón o cacerola grande, teniendo cuidado de no exprimir las bayas demasiado fuerte, de lo contrario, la gelatina no se volverá transparente.
Paso 5
Vierta la jalea de grosella roja preparada en frascos esterilizados y bien secos. Dejar enfriar. Cerrar con tapas de plástico. Almacenar en refrigerador.