Ha llegado el ansiado verano y quiero algo ligero, sabroso y que no tarde mucho en cocinarse.
Lava los calabacines y córtalos en tiras finas.
Batir dos huevos con un tenedor. Rejilla de queso en un rallador fino. Mezcle el queso y todos los ingredientes restantes (excepto el aceite de oliva y el pan rallado).
Sumerge cada palito de calabacín en el huevo.
Luego rebozar en pan rallado.
Engrasar una placa de horno con aceite de oliva y colocar allí los palitos.
Hornear en horno precalentado a 180°C durante 5 minutos en convección + grill por un lado. Luego voltee y hornee por otros 5-10 minutos hasta que esté listo.