
Preparar la masa. En un bol bate los huevos con batidora a máxima potencia hasta que doblen su tamaño, añade el azúcar. Obtendrás una masa homogénea, ligera y cremosa. Añade crema agria a los huevos y bate. Apaga el bicarbonato con vinagre y añádelo a la masa. Añade la harina poco a poco, mezclando bien la masa con movimientos envolventes de abajo hacia arriba. Divida la masa en dos partes. Añade cacao a uno de ellos y mezcla hasta que quede suave.

Vierte el bizcocho en el molde. Cubre el fondo del molde con papel de horno o pergamino. Engrase el fondo y los lados con aceite vegetal. Coloque 2 cucharadas de masa ligera en el centro. Vierta la misma cantidad de mezcla de chocolate en la parte central superior. Continúa haciendo capas hasta que te quedes sin masa.

Cocer un pastel en el horno. Coloque la sartén en un horno precalentado a 180 grados durante unos 40 minutos. Compruebe la preparación con un palillo. Debe salir del centro del pastel seco y sin migas. Luego de hornear, retira el bizcocho y déjalo enfriar. Luego, corte el pastel por la mitad en dos círculos planos usando un cuchillo afilado o un hilo culinario especial.

Preparar la crema para el pastel. Batir los huevos y el azúcar con una batidora, verter la leche. A continuación, vierte la mezcla en una cacerola y ponla a hervir a fuego medio, revolviendo constantemente. Luego dejarlo enfriar. Batir la mantequilla ablandada con una batidora durante unos 10-15 segundos, sin dejar de batir, agregar la mezcla de huevo y leche, vertiendo 1 cucharada a la vez.

Montar la tarta. Unta la crema sobre las capas del bizcocho y únelas. Extiende la crema restante sobre la superficie del pastel.