Las fragantes tortitas de requesón y vainilla son uno de los platos de desayuno favoritos de muchos niños. Les gusta que los pasteles de queso tengan un sabor diferente dependiendo de cómo se vierten: crema agria, leche condensada, diferentes tipos de mermelada. ¡A los niños les encanta la variedad!
Combine todos los ingredientes y mezcle bien. Formar cheesecakes en forma de barriles y empanizados en harina.
Freír los pasteles de queso por ambos lados en aceite vegetal. Cuando los cheesecakes estén casi listos, agrega un trozo de mantequilla a la sartén y lleva a temperatura baja hasta que esté cocido.
Coloque los pasteles de queso de vainilla terminados en un plato y espolvoree con azúcar en polvo. Servir con crema agria.