Preparar las bayas. Coloque las fresas en una cacerola y cúbralas con azúcar. Déjalo reposar durante 2 o 3 horas para que suelte los jugos.
Hacer mermelada de fresa y menta. Coloque la sartén sobre el fuego y cocine las bayas a fuego lento. Después de hervir, agregue la ralladura y el jugo de limón, revuelva y hierva durante 15 minutos. Retira la cacerola del fuego y deja enfriar un poco la mermelada. Añade la menta y vuelve a poner a fuego lento. Cocine, revolviendo, durante otros 10 minutos. Apaga el fuego.
Envíe la mermelada para su almacenamiento. Vierta el postre caliente en frascos limpios y enrolle las tapas. Dar la vuelta y dejar enfriar. Colóquelo en un sótano o refrigerador para su almacenamiento.