El hojaldre es la mejor opción para aquellos que son aficionados a la repostería casera, pero no quieren pasar medio día cocinando. Por cierto, el hojaldre ya se menciona en el siglo XVII y su componente principal era la mantequilla, de la que había aproximadamente la misma cantidad en la masa que de harina. Es gracias a la mantequilla que los hojaldres, tartas y pasteles terminados tienen una textura tan delicada. Añadimos manzanas caramelizadas a esta textura. Ya solo te queda prepararlo y degustarlo.
Paso 1

Derretir la mantequilla y el azúcar en una sartén precalentada. Agregue las manzanas picadas y cocine a fuego medio hasta que el jugo se evapore y las manzanas se ablanden.
Paso 2

Extiende la masa hasta formar una capa de unos 4 mm de espesor y córtala en cuadrados del mismo tamaño.
Paso 3

Hacer pequeños cortes en un lado de los cuadrados, colocar las manzanas en el otro lado y sellar bien los bordes de la masa.
Paso 4

Colocar los hojaldres en una bandeja de horno, pincelarlos con yema y hornear durante 20 minutos.