Calentar una sartén honda con aceite vegetal. Reduce el fuego a medio y agrega las rodajas de papa en una sola capa. Freír hasta que esté dorado, 3-4 minutos por cada lado. Coloque las patatas fritas sobre una toalla de papel para eliminar el exceso de aceite.
Preparar el relleno. En un bol, mezcle la ricota y los huevos hasta que quede una mezcla homogénea. Desmenuzar el queso feta sobre la ricota. Añade las hierbas picadas y las salchichas a la mezcla de queso. Añade sal y pimienta al gusto y revuelve.
Engrasar con mantequilla un molde desmontable de 20-22 cm de diámetro. Coloque rodajas redondas de papa en el fondo, superponiéndolas de manera que el fondo de la sartén quede completamente cubierto. Forrar los lados del molde con rodajas largas, también superpuestas. Distribuye el relleno de queso uniformemente. Hornear en el horno durante 40-45 minutos a 185ºC.