1. Lave las ciruelas, corte y quite los huesos. Partir el ajo en dientes y pelar. Pon un diente de ajo en cada ciruela. Coloque las ciruelas en frascos. 2. Hervir agua con azúcar, vinagre y especias. Vierta el almíbar caliente sobre las ciruelas y déjelo toda la noche. Al día siguiente, escurrir el almíbar, volver a hervir y verter sobre las ciruelas. Cierre los frascos y almacene.