Los panqueques no sólo son una de las opciones de desayuno más deliciosas, ¡sino también la más antigua! A nuestros antepasados también les encantaba darse el gusto de comer esponjosos panqueques. En todos lados los llamaban de manera diferente: en algún lugar oladki, en algún lugar olashki, y en algún lugar incluso alyabyshi. La mayoría de las veces, los panqueques son el plato estrella de cualquier abuela. Mucha gente tiene cálidos recuerdos de la infancia asociados a este plato. Hoy intentaremos hornear esos mismos panqueques de la “abuela”.
Paso 1

En un recipiente hondo, mezcle el huevo, la harina y el kéfir. Batir la mezcla resultante con un batidor hasta que quede suave.
Paso 2

Añade a la masa resultante sal, polvo para hornear y azúcar y mezcla todo bien.
Paso 3

Calienta una sartén y cúbrela con una fina capa de aceite vegetal. Con ayuda de un cucharón, coloque con cuidado los panqueques en la sartén. Freír durante un minuto por cada lado.