Calentamos una sartén con aceite vegetal y mantequilla (75 g) y freímos el ajo con los champiñones. Añade sal y pimienta al gusto.
Preparar la bechamel. Derretir la mantequilla restante en una cacerola, añadir la harina y, revolviendo continuamente, verter poco a poco la leche. Añade sal, pimienta, nuez moscada, revuelve y deja que la salsa espese.
Cocine las láminas de lasaña hasta que estén al dente.
Engrasa una fuente para horno con aceite, coloca las láminas de lasaña y distribuye uniformemente la salsa, los champiñones y el queso rallado por encima. Coloque la siguiente capa. Cubrir con el resto de la lasaña, verter la salsa y espolvorear con queso. Hornear en horno durante 45 minutos a 180ºC.