
Preparar la gelatina. Vierta agua caliente en una cacerola y agregue la mermelada. Remueve hasta que quede suave. Coloque la sartén a fuego lento. Añade gelatina instantánea. Remueve hasta que la gelatina se disuelva. No dejar hervir. Retirar del fuego y dejar enfriar durante 15 minutos. Vierta la mezcla en los moldes. Colóquelo en el refrigerador durante 3 horas.