Añade una pizca de sal a las claras y bátelas hasta que se formen picos firmes. Añade el azúcar a las yemas y bate hasta que quede suave. Batir la nata aparte. Mezclar con las yemas. Sin dejar de batir, añade un poco de vainilla. Añade con cuidado las claras de huevo batidas y mezcla toda la mezcla hasta que quede suave. Transfiera la mezcla terminada a un recipiente pequeño con tapa hermética y colóquelo en el congelador. Durante las primeras 2 horas, bata el helado cada 25-35 minutos. Después de esto, déjalo reposar durante 60 minutos para que se endurezca por completo.