Panecillo, chuleta picada, ensalada y queso: así es el aperitivo ideal que apareció hace cien años y conquistó inmediatamente el mundo entero. El secreto de un éxito tan sorprendente es simple: la hamburguesa es fácil de preparar y puedes combinar en ella tus ingredientes favoritos, especialmente si hablamos de una hamburguesa casera. Es increíblemente abundante y, lo más importante, es cómodo para comer sobre la marcha, y en una época en la que siempre falta tiempo, esto es realmente importante.
Paso 1
Salpimentar la carne picada, mezclar bien y formar una chuleta.
Paso 2
Freír la chuleta en aceite vegetal caliente (3 minutos por cada lado).
Paso 3
En una sartén seca, tuesta el pan de hamburguesa hasta que esté dorado. Unta el interior de las mitades con la salsa.
Paso 4
Armar la hamburguesa: colocar la carne en la mitad inferior, encima el queso, luego el tomate, la lechuga y cubrir con la segunda mitad.
Paso 5
Sujete el panecillo superior con una brocheta larga de madera y sirva.
