Picar la cebolla en cubitos pequeños.
Rallar el queso con un rallador fino.
Derretir un poco de mantequilla en una cacerola, cazo o sartén con bordes altos, luego agregarle aceite vegetal.
Añade la cebolla a la cacerola y fríela a fuego lento hasta que esté transparente durante 2 o 3 minutos.
Vierta un tercio del caldo en las cebollas y llévelo a ebullición.
Luego añade el arroz al caldo.
Revolviendo constantemente, cocine el risotto a fuego lento hasta que el caldo se absorba completamente en el arroz. Añade otro tercio del caldo y repite.
Luego agregue a esta cacerola (o a una aparte) con arroz queso rallado, hierbas, mantequilla, sal y pimienta negra molida a gusto.
Remueve bien el risotto y déjalo reposar durante 5-7 minutos. Sirva el risotto caliente con una baguette francesa. ¡Buen provecho!