Hervir las zanahorias para hacer chuletas. Coloque las zanahorias en una cacerola. Llénelo con agua fría limpia. Coloque las zanahorias a fuego lento para que se cocinen a fuego lento. Después de hervir, cocínelo durante unos 15 minutos. Comprueba que la zanahoria está lista pinchándola con un cuchillo: si el cuchillo entra fácilmente, la zanahoria está lista. Escurre el agua de la sartén y deja enfriar las zanahorias.
Ralle las zanahorias hervidas y enfriadas en un rallador fino o mediano. Si rallas las zanahorias con un rallador grueso, las chuletas quedarán ásperas y la carne picada puede empezar a deshacerse al mezclarla. Combine las zanahorias ralladas con las cebollas picadas.
Formar hamburguesas de zanahoria. Añade azúcar y sal a las zanahorias. Añade 3 cucharadas de sémola. Deje reposar la carne picada durante 10-15 minutos. Durante este tiempo, la sémola se hinchará y unirá mejor todos los ingredientes. Vierta la sémola reservada en un plato aparte. Utilice una cuchara para sacar las zanahorias y formar hamburguesas redondas. Rebózalas en sémola y colócalas sobre una tabla.
Comenzamos a freír las rodajas de zanahoria. Calienta una sartén a fuego alto. Echarle aceite encima. Coloque las chuletas en la sartén. Freír a fuego medio durante unos 5 minutos de cada lado hasta que se doren. No es necesario tapar el recipiente: las zanahorias ya están cocidas y, con una tapa, no quedará una corteza crujiente.