
Añade a la harina tamizada el azúcar, la sal, la levadura y la mantequilla. Agregue agua y revuelva. Amasar la masa hasta que esté suave durante unos 15 minutos, luego cubrir con una toalla y dejar en un lugar cálido durante 60 minutos.

Preparar el relleno: colocar el repollo y la cebolla en una sartén con aceite caliente, agregar sal, remover y cocinar a fuego lento hasta que estén tiernos (unos 15 minutos), revolviendo ocasionalmente.

Divida la masa en partes iguales y extienda bizcochos planos de 0,5 cm de grosor. Ponga un poco de relleno en el centro de cada torta plana y pellizque la masa, formando una tarta.

Colocar los espacios en blanco en una bandeja para hornear, pincelar con yema y colocar en un horno precalentado durante 20 minutos.