El trigo sarraceno contiene muchas vitaminas que son esenciales para nuestra salud y, además, es muy saciante. Por lo tanto, es necesario preparar este plato tan a menudo como sea posible. El trigo sarraceno se puede cocinar con carne, al estilo tradicional, o con setas. La última opción de cocción puede ser utilizada incluso durante la Cuaresma o por quienes están a dieta. Una cena de trigo sarraceno con champiñones se puede complementar con una ensalada de verduras, chucrut o preparaciones caseras de invierno.
Paso 1

Pelar y picar finamente la cebolla.
Paso 2

Enjuagar el trigo sarraceno y freírlo en una sartén seca.
Paso 3

Freír las cebollas y los champiñones en una sartén, añadiendo un poco de agua para que los champiñones no se sequen. Añade sal y pimienta al gusto.
Paso 4

Coloque las cebollas y los champiñones en porciones iguales en las ollas.
Paso 5

Añade granos de trigo sarraceno y mantequilla a las ollas en porciones iguales.
Paso 6

Llena las ollas con agua hasta el borde, cúbrelas con una tapa y colócalas en un horno precalentado a 180 grados durante 40-45 minutos.