Divida cuidadosamente el filete de pollo en dos partes.
Ralle el queso parmesano con un rallador grueso.
Envuelva el filete en tiras de tocino (el tocino debe encerrar el pollo en un capullo).
Rompa dos huevos en un recipiente hondo y bátalos con un batidor o un tenedor.
En un recipiente hondo, mezcle el queso picado, la sal, las especias y el pan rallado.
Pasa el pollo por harina, luego por huevo y luego por la mezcla de pan rallado y queso.
Coloque el filete en una bandeja para hornear preparada forrada con papel pergamino. Hornee el plato en un horno precalentado a 180 grados durante 45 minutos.
Cuando esté listo, retira el plato del horno. ¡Buen provecho!