Preparar la carne para los rollitos. Corte la pechuga de pollo en trozos finos a lo largo, como para hacer chuletas. Golpea la carne con un martillo de cocina, pero con mucho cuidado para no dañar las fibras. Cubre una bandeja para hornear con papel de aluminio. Coloque los filetes de pollo superpuestos uno sobre otro para formar una capa continua de pechuga. Añade sal, pimienta y especias al gusto. Rallar el ajo con un rallador fino y extenderlo sobre la superficie de la capa de carne.
Preparar el rollo. Coloque trozos de queso encima del filete de pollo para cubrir toda la superficie tanto como sea posible. Enrolle la carne y el relleno formando un rollo. Cubre la superficie del rollo con finas lonchas de tocino y añade especias. Envuelva el rollo en papel de aluminio y apriete bien los bordes. Precalentar el horno a 180˚C. Hornee el rollo durante 35 minutos. Cortar el rollo terminado en porciones.