
Preparar la masa. Tamizar 1/3 de toda la harina a través de un colador. Vierta la leche en un recipiente, caliéntela ligeramente y disuelva la levadura en ella. Añade la harina y revuelve. Cubrir con una toalla y dejar reposar durante 40 minutos.

Preparar la masa. Separar las claras de las yemas. Utilizando una batidora a velocidad media, mezcla las yemas con 200 g de azúcar y la sal. Batir la mantequilla con una batidora hasta conseguir una consistencia cremosa. Batir 3 claras de huevo y 50 g de azúcar hasta obtener una mezcla esponjosa. Reserva 2 claras de huevo para el glaseado. Añade a la masa las yemas con el azúcar, la mantequilla batida, las claras batidas, la vainilla y la harina. Amasar bien la masa. Coloque la masa en un bol, cúbrala con un paño y déjela reposar durante 60-90 minutos. Añade frutas confitadas y pasas. Amasar nuevamente la masa y dejarla levar nuevamente.

Hornea algunos pasteles de Pascua. Divida la masa en trozos. Coloque cada pieza en un molde para hornear de papel desechable, llenándolo hasta 2/3 de su capacidad. Deje reposar la masa. Precalentar el horno a 180 grados. Hornear durante 30 minutos. Sacar los pasteles de Pascua terminados del horno y dejarlos enfriar.

Preparar el glaseado. Batir 2 claras de huevo con el jugo de limón y el azúcar glas. Pincela la parte superior del pastel con glaseado. Decorar con chispitas.